Si me pongo a pensar, ya hacía dos años que me estaba haciendo la guerra, hablando de mí con mi primogénito -no sé lo que le pasa últimamente, estará saliendo con otro tipo, - porque no podía ser que me había vuelto tan "rebelde", al querer salir y no querer lavar , planchar y cocinar...
"cuando cobro te lo pago" decía. Si después había más gastos no interesaba, había que pagar lo que había comprado y ahorcarnos todo el mes (cuando no, dejar cosas sin pagar) con lo cual se iban acumulando las deudas, y mientras tanto había que seguir viviendo... uno estaba en permanente
estrés rezando que no sucediera nada grave, porque sino había que pedir plata prestada , y era otra deuda más a las ya existentes... y así vivíamos a los saltos, a los tumbos. yo también fui responsable de eso, pero ahora decidí cambiar la historia.
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